MECANO, NO ME ENSEÑEN LA LECCIÓN

SEMANA DEL 6 AL 10 DE JUNIO DE 2022

“No te aburras más, cierra el libro ya, toda la lección puede ser mortal” es el comienzo de una antigua canción de Mecano, de aparente naturaleza subversiva, y que para más de uno puede invitar a la rebelión frente al conocimiento.
Pero no todo en la lección es malo, o al menos tanto. La lección es la piedra angular sobre la que todas las relaciones del aula se sostienen. Une a los malotes que fastidian, gallos del gallinero, con su infinito pulso al profesor; acerca a los cerebritos, únicos lectores de los arcanos de cada materia que han sabido ver el aleph que toda asignatura tiene; reúne a los “supervivientes”, fieles creyentes en San Judas Tadeo, y de sus ministros en la tierra, los profes particulares, que se reúnen como sumos sacerdotes en ese día especial de la semana, en el templo de San Refuerzo, rogando con fe por el próximo aprobado. Y a los alumnos, a todos ellos, con el profesor, ese ser siempre en el fondo desconocido, demiurgo de poder, que unas veces se prodiga en generosa clemencia y otras dictamina de forma inmisericorde. Y siempre “esperando soñar con algo mejor”, para comprobar, tras el amanecer de la graduación, que la vigilia del mundo exterior fue precedida por un sueño que entonces era presente, el querer que nos enseñaran la lección.